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miércoles, 16 de abril de 2014

Evaluación de los aprendizajes en la EaD "en línea" (Lectura 2)

La siguiente entrada (actividad 1) se realiza en el marco de la asignatura Electiva III: Paradigma de Evaluación Educativa, bajo la facilitación del Dr. Ramón Reyes, de la V cohorte del Doctorado en Ciencias de la Educación que ofrece la Universidad Fermín Toro
Actividad 1.a Análisis de un artículo ofrecido como referencia (*) y precisión de una de las ideas desarrolladas en él para luego contrastarla con otro dos artículos (seleccionados por el participante) con cuya autores tenga, con uno coincidencia, y con el otro, contraste en sus enfoques para abordar el tema y finalmente fijar posición personal.
Cometido 1.a. Análisis del artículo de referencia (*) ofrecido por el facilitador.
(*) Título del artículo de referencia: Evaluación del aprendizaje en la educación a distancia “en línea”.
Autora: Quesada Castillo, Rocío (2006).
Fuente: Publicación en línea. Murcia (España). RED Revista de Educación a Distancia. Año V. Número monográfico VI.-  30 de Septiembre de 2006. Número especial dedicado a la evaluación en entornos virtuales de aprendizaje. http://www.um.es/ead/red/M6/

En su artículo la autora critica las pocas referencias que proponen, con fundamento, cómo evaluar los aprendizajes en la educación a distancia (EaD) “en línea”. En ese sentido, aborda en su trabajo, de manera integral, elementos esenciales que deben estar presentes en el EaD que van más allá de los aspectos técnicos, de diseño, acceso y que den relevancia a: las formas de evaluar, los procedimientos, los instrumentos y en el cómo evaluar. En fin, la autora, pone énfasis en la importancia de la didáctica sobre la tecnología y expone que son tres las funciones sustantivas de la evaluación del aprendizaje en la enseñanza tradicional y a distancia “en línea”: (a) la diagnóstica, de la cual señala que se puede prescindir, (b) la formativa y la (c) sumativa.
En cuanto a la formativa, señala que ésta es “muy útil” en la educación presencial aunque no se le usa en una proporción deseable pero, advierte, que en la modalidad a distancia “en línea”, es imprescindible, constante, suficiente, pertinente y debe estar bien diseñada para apoyar el aprendizaje.  Se aprecia la valoración que hace la autora de este tipo de evaluación cuando concluye que ésta “es sustantiva para el aprendizaje a distancia ‘en línea’, sin ella, éste difícilmente se lograría”.
En cuanto a la evaluación sumativa comparte el criterio con otros autores de que ésta tiene la misma importancia en ambas modalidades, presencial y a distancia, excepto que en la primera pueden asignarse tareas que no son posibles exigirlas en la segunda.
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 Cometido 2.a. Análisis de un ensayo (**) para detectar coincidencias con los planteamientos hechos en el artículo de referencia: Evaluación del aprendizaje en la educación a distancia “en línea” de  Quesada, Rocío (2006).
 (**) Título del artículo: El empleo de las nuevas tecnologías en la evaluación de los aprendizajes a distancia.
Autora: Romera, Carolina (2004).
Fuente: Primer Congreso Virtual Latinoamericano de Educación a Distancia. http://www.ateneonline.net/datos/64_03_Romera_Carolina.pdf

En el artículo de esta autora se aprecia mucha coincidencia en su enfoque con el de Quesada (2006) ofrecidos como referencia para su análisis, al menos en tres sentidos: primero, se aprecia  cierta analogía, entre ambas, en el planteamiento de las ideas sobre el tema de la evaluación y, en cuanto a la primacía de lo pedagógico sobre lo tecnológico, cuando consideran que la evaluación debe estar centrada en el aprendizaje: quiénes aprenden, qué aprenden y bajo qué condiciones aprenden, es decir, en lo pedagógico, y que, las Nuevas Tecnologías de la Información y la Comunicación (NTIC) deben estar supeditadas a lo pedagógico; lo que significa que las NTIC representan el medio utilizado para desarrollar  actividades para propiciar el aprendizaje.
Segundo, cuando establece comparaciones en el cómo se realiza la evaluación de los aprendizajes en la modalidad presencial y en la educación a distancia, observando que mayormente se mantiene en esta última la práctica equivocada de la presencialidad al proponer actividades de evaluación no acordes con las ejecutadas durante el proceso de aprendizaje; hecho que significa desaprovechar las NTIC con fines de evaluación, hoy, una tendencia generalizada.
Una tercera convergencia de ideas  entre estas dos autoras es la importancia que le otorgan a la evaluación formativa cuando asumen que debe hacerse uso adecuado de las NTIC para superar la tendencia actual de desaprovechamiento de éstas en el logro del aprendizaje. No obstante, partiendo de la finalidad comprobatoria  del logro de los objetivos que tiene la evaluación sumativa, ambas se complementan.
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Cometido 3.a. Análisis de un ensayo (***) para detectar contrastes con los planteamientos realizados en el artículo de referencia: Evaluación del aprendizaje en la educación a distancia “en línea” de  Quesada, Rocío (2006).

 (***) Título del artículo: Los retos de la educación a distancia
Autor: Sangrá, Albert (2002).
Fuente: Los retos de la educación a distancia. Boletín de la Red Estatal de Docencia Universitaria. Vol. 2 N.º 3. http://bit.ly/1p9Y9I3.

En este artículo el autor resalta la incorporación de las Tecnologías de la Información y la Comunicación (TIC) como elemento mediador y modernizador en el proceso de aprendizaje y destaca a la modalidad de estudio a distancia como una alternativa ante la modalidad presencial o tradicional; señala que ambas deben “entenderse” y comprender sobre la necesidad de  involucrarse para apuntar hacia la transformación de la educación tradicional. En este sentido, plantea el ensayista que la educación está obligada a enfrentar  a la brevedad retos y entre ellos destaca uno, la calidad de la formación universitaria y la promoción de la investigación.
Al respecto, el autor se refiere a los retos que se plantea la educación a distancia y los relaciona con la mediación de las TIC destacando, a su criterio, los siguientes aspectos: accesibilidad a las comunidades; sistema personalizado de acuerdo a las necesidades de los estudiantes; flexibilidad en el currículo, ritmo y estilos de aprendizaje y de evaluación; interactividad de los materiales; cooperación en el proceso de aprendizaje y cierra con la búsqueda de la calidad.
En cuanto a este planteamiento llama la atención que entre los retos no se menciona ninguno relacionado con el proceso de evaluación de aprendizajes: las formas de evaluar, instrumentos para evaluar y cómo evaluar en los entornos virtuales. Por el contrario, enfatiza en los criterios de carácter técnicos, de diseño y de la calidad del proceso, pero, obviando el criterio evaluativo, hecho que constituye la crítica que hace Quesada (2006) en su artículo.
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Cometido 4.a Posición personal en relación con el análisis realizado al artículo de referencia: (a) Evaluación del aprendizaje en la educación a distancia “en línea” de  Quesada, Rocío (2006) y a los ensayos: (b)  El empleo de las nuevas tecnologías en la evaluación de los aprendizajes a distancia (Romera, Carolina, 2004) y (c) Los retos de la educación a distancia (Sangrá, Albert, 2002).

Una vez analizados estos tres artículos relacionados con el tema de la modalidad de estudios a distancia (EaD) “en línea” pienso en las potencialidades de esta modalidad y del refuerzo que le da la incorporación de las Tecnologías de Información y Comunicación (TIC), como medio de aprendizaje, para apuntar hacia la formación, con calidad de recursos humanos que involucren cambios y/o transformaciones en la sociedad actual.
Por supuesto, para alcanzar estos propósitos es necesario la reflexión y el discernimiento en la instrumentación de los modelos de aprendizajes para la educación “en línea”. En primer lugar, hay que partir de la posición de las diferencias que existen entre la educación presencial y la educación a distancia. En la primera el medio de aprendizaje es la clase magistral y en la segunda las TIC; esto significa  que no debemos repetir los métodos, técnicas y estrategias de la presencialidad en la EaD. 
En  segundo lugar, las instituciones que decidan involucrarse en la EaD deben cuidar en no hacer énfasis en las TIC, como ocurre mayormente; éstas son sólo el medio. Al contrario hay que exaltar lo pedagógico y admitir a las TIC como medio y recursos de aprendizaje. En este sentido y para apuntar hacia la calidad, aprecio que además de considerar los aspectos técnicos, de diseño instruccional y de accesibilidad a la formación hay que subrayar la importancia de atender a los elementos pedagógicos, a la forma de enseñar y, especialmente al cómo evaluar los aprendizajes. Lo pedagógico priva sobre lo tecnológico.

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